Tu producto o servicio se merece llegar lejos porque conoces bien cómo resuelve los problemas de tus potenciales clientes. Sabes que puede hacer mucho por ellos.
Sin embargo, no logras visibilidad.
Todos los días ves marcas que lo están petando en Instagram y aunque ya te han dicho que lo importante no es el número de likes, el tema te tiene frito porque no consigues crear un vínculo con tu comunidad ¡Ni invirtiendo en publicidad!
Has dado más vueltas que una peonza cambiando el tipo de contenidos, subiendo frases motivacionales (ohhh sí, se comparten mucho) o mostrando tu cara (la gente dice que humaniza). Lo has intentado con campañas de pago… y tampoco.
Te lo sabes (casi) todo. O eso crees.
Pero nada. No consigues conectar con la audiencia.
Mientras sientes que destacar entre la competencia es misión imposible, los sueños sobre tu marca se van desvaneciendo.
Es desolador porque has luchado mucho por ella.
Necesitas un cambio de rumbo y empezar a ver resultados.